¿Qué son las conjuntivitis?
Hablamos de conjuntivitis cuando hay una inflamación o infección de la conjuntiva del ojo, que es la membrana mucosa y transparente que recubre el interior del párpado y la esclera (parte blanca del ojo). Se trata de una de las patologías oftalmológicas más frecuentes, tanto en adultos como en niños, y raramente implican gravedad.
Causas:
Existen diferentes causas que pueden provocar conjuntivitis; pasamos a relatar las más frecuentes:
- Conjuntivitis vírica: El agente etiológico es un virus, como los de algunos catarros de vías
respiratorias. Pueden estar afectados uno o ambos ojos y es altamente
contagiosa, pudiendo propagarse por la tos o estornudos y por contacto.
- Conjuntivitis bacteriana: Se diferencia de las anteriores en que se presenta con una secreción del ojo amarillenta o verde-amarillenta y pegajosa. A menudo se encuentran afectados los dos ojos. Es contagiosa pero habitualmente por contacto directo con las manos infectadas o elementos que hayan tocado el ojo.
- Conjuntivitis alérgica: De ella hemos hablado en otro post de este mismo foro previamente. No es contagiosa. Está ocasionada por alérgenos oculares como el polen o el polvo, por tanto, puede ser estacional (polen) o aparecer en brotes durante todo el año.
- Otros: Ciertos medicamentos, y muchas otras sustancias químicas, pueden causar irritación conjuntival. También pueden causar irritación los cuerpos extraños y las lentes de contacto.
Síntomas
El diagnóstico de las conjuntivitis es clínico, basado en los siguientes síntomas y los antecedentes del paciente (por ejemplo, contacto con personas previamente enfermas o con alérgenos o medicamentos tópicos que puedan causarlas):
- Enrojecimiento ocular.
- Leve fotofobia.
- Sensación de arenilla o cuerpo extraño bajo el párpado y lagrimeo que actúa como medida de defensa intentando lavar la conjuntiva y arrastrar los agentes nocivos.
- Secreción conjuntival. Los párpados y pestañas pueden llegar a pegarse cuando las secreciones se secan, formando una especie de costra.
Duración
La conjuntivitis es, por lo general, una enfermedad de corta duración. Sin embargo, los síntomas pueden durar más o menos tiempo en función de la causa que ha originado la inflamación de la conjuntiva y de si se está tratando de manera adecuada o no. Por lo tanto, la duración de la inflamación de la conjuntiva dependerá, en gran medida, de un correcto diagnóstico y de un adecuado tratamiento.
¿De cuánto tiempo estamos hablando? Veamos cada una de las situaciones posibles:
- Conjuntivitis vírica: Son las
que más pueden llegar a durar. Por norma general, los síntomas están presentes
entre una y dos semanas.
- Conjuntivitis bacteriana: Su duración suele oscilar entre siete y diez días, siempre que trate de manera adecuada.
- Conjuntivitis alérgica: La duración dependerá del tipo de alergia y del grado de exposición al agente causante de la conjuntivitis. Generalmente, la inflamación en los ojos desaparece unos días después de haber entrado en contacto con el alérgeno y siempre que la exposición a la sustancia que provoca la alergia haya cesado.
- Conjuntivitis por irritación: La duración suele ser de unos días, en función de la gravedad de la irritación.
Tratamiento y prevención
Dependerá del tipo de conjuntivitis, aunque la mayoría son autorresolutivas, y las medidas terapéuticas van encaminadas a mejorar los síntomas o acortar la duración de la afección, e irá típicamente dirigido de forma específica frente a la etiología causante (por ejemplo, colirios antibióticos para las conjuntivitis bacterianas o antihistamínicos para las alérgicas). Asimismo, como medidas generales y profilácticas, se suele recomendar:
- Lavar las manos frecuentemente.
- Cubrir la nariz y la boca al toser y estornudar y evitar frotarse los ojos.
- No utilizar toallas, almohadas, sábanas u otro tipo de objetos que hayan podido estar en contacto con una persona infectada de aquellas tipologías que puedan ser contagiosas.
- Ser muy exhaustivo en la higiene de las lentes de contacto y sustituirlas en cuanto sea preciso.
- Precaución con los cosméticos empleados; algunos pueden contener productos que pueden producir alergia o irritación.
- En caso de alergia al polen, se recomienda evitar los ambientes con altas concentraciones del mismo, y usar gafas de sol para salir a la calle.
- En caso de conjuntivitis infecciosas puede ser necesario quedarse en casa unos días para evitar el contagio a otras personas.